El río avanzó raudo, llevándose todo. Sólo dejó desolación, miseria y dolor. Atrás no quedó nada; adelante el río sigue avanzando con menos furia. Los de allá no saben nada de los de acá.
El río avanzó raudo, llevándose todo. Sólo dejó desolación, miseria y dolor. Atrás no quedó nada; adelante el río sigue avanzando con menos furia. Los de allá no saben nada de los de acá.
Bravo Jesús, eres un perseguidor de la poesía que hay en todos los momentos vitales, estás en el camino.
Me gustaMe gusta
Gracias Bernardo por los comentarios alentadores, también agradecido por el encuentro del día de hoy con los amigos y amigas de Taller 8, el apoyo que he recibido me motiva para seguir en mis búsquedas personales.
Me gustaMe gusta
Gracias Bernardo, seguiré en esa búsqueda día a día.
Me gustaMe gusta