Habitando las calles inundadas de cachivaches
hecho en china, me refugio evadiendo tu recuerdo,
me distraigo mirando las vitrinas del sector comercial,
evitando recordar tu imagen oculta entre maniquíes.
…
Busco un texto en la librería que me ayude a escapar
de tu imagen, que me tortura casi hasta la muerte;
me sumerjo en sus páginas colmadas de tipografías
que no hacen sino recordar tu nombre.
…
En casa me entierro en el sofá de la sala,
me entrego a la caja de luz que me hipnotiza
con el único fin, de no acordarme de ti,
pero tu cuerpo de venus aparece en cada imagen.
…
En la noche me refugio en mi cama, solitario
en busca del esquivo sueño, después de haber andado
por caminos en busca de la poción mágica del olvido;
a medianoche me despierto, con tu imagen pegada al alma.